Mantenidas por cocineros amateurs, foodies y estudiantes de Nutrición, las cuentas que comparten tips y recetas son furor en la red social
Natalia Laube
Foto:LA NACION
Es la pregunta del millón, la que no distingue fronteras y una de las que mayor cantidad de veces se formulan cada día: "Y hoy, ¿qué comemos?" Cocinar de forma variada y en lo posible atractiva es siempre un desafío, más aún si se tiene poco tiempo. Por suerte, la inspiración puede llegar a través de canales cada más diversos: a los libros de cocina, a la Web y a ese género en sí mismo que es la charla de oficina sobre el menú de cada día hay que sumar una cantidad de cuentas de Instagram que, jornada a jornada, amplían su acervo de recetas y ofrecen tips para novatos. Detrás de cada una, un grupo de apasionados chefs de entre casa trabaja probando nuevos platos, fotografiando los resultados y compartiéndolos, finalmente, a través de su teléfono. En el último año, la Argentina se sumó a una tendencia que ya es mundial: durante 2015 surgieron decenas de cuentas de Instagram dedicadas a la gastronomía, en su mayoría mantenidas por cocineros amateurs, foodies y estudiantes de Nutrición. Del otro lado son cada vez más los que planifican sus comidas con ayuda de estos aficionados que, muchas veces en la misma ciudad y a la misma hora en que la mayoría, están pensando qué cocinar, suben la solución al timeline.
Cuando a mediados del año pasado renunció a su trabajo en el rubro Marketing para empezar a construir una carrera freelance, El Gordo (que prefiere no dar su nombre, "porque lo que importa es la comida, no yo") descubrió que pasar tanto tiempo en su casa le permitía forjar hábitos nuevos. Ahí nomás se reencontró con la cocina, un hobby que tenía semiabandonado por falta de tiempo, y abrió @elgordococina, la cuenta de Instagram que ideó para subir las fotos de sus platos. En pocos meses llegó a juntar los más de 50 mil seguidores que cada día likean sus fotos y que, sin que él se lo haya propuesto, lo convierten en un referente de la cocina hecha en casa. "Todo lo que ves en las fotos se hizo en mi cocina y se preparó tal cual sale en las imágenes, no hago food styling ni fotografío platos que no me vaya a comer", aclara él, cultor de la gastronomía real y, también hay que decirlo, bastante alejada de lo light. "Mi objetivo es que la gente coma mejor, pida menos delivery y le pierda el miedo a la cocina. Trato de simplificar mucho las recetas y casi nunca utilizo ingredientes difíciles: la gran mayoría de los platos se pueden preparar con cosas que comprás en la verdulería, la carnicería o el chino." Su propia fuente de inspiración es, sobre todo, Internet: "Mi básico es Comfort food, de Jamie Oliver, pero sobre todo investigo mucho en las páginas que me gustan: BuzzFeed Food, Tasty, TipHero... La mayoría de las recetas básicas llevan muy poco tiempo de preparación. Hacer unos chipás caseros te lleva media hora y te cambia la mañana. A veces se trata de incorporar un pequeño hábito que te mejora la vida", se entusiasma.
Con una trayectoria de casi veinte años como chef profesional y food stylist, Valentín Grimaldi (@cookgrimaldi) dice que nunca tuvo tanta llegada e intercambio con la gente como desde que abrió su cuenta en Instagram, hace un año. "Escuché infinidad de veces la frase «nunca sé qué cocinar» y, para alguien que está todo el día metido entre cacerolas como yo, pensar platos distintos es un acto muy natural. Sentí que podía estar bueno compartirlo", dice. Como su trabajo consta de cocinar para las fotografías de campaña de muchas marcas, Valentín comenzó subiendo las imágenes de los platos que preparaba, pero la cuenta explotó cuando, por consejo de la chef Tefi Russo (@inutilisimas), comenzó a sumar también las recetas. Hoy, más de 30 mil personas siguen su cuidada galería de imágenes.
Otro pequeño subfenómeno que trajo la marea gastronómica en Instagram es el de las "cuentas fit": casi siempre sostenidas por médicos y nutricionistas, ofrecen alternativas light en desayunos, platos salados y pastelería. Una de las primeras en abrir una fue Rocío Engstfeld (@eatcleanOK), y tras ella vinieron otras más. Con 19 años, Julieta Rochinas (@greencook), estudiante de Nutrición, es una de las exponentes más jóvenes del fenómeno. "Abrí la cuenta el año pasado, me apasiona cocinar y me encanta que la gente disfrute de lo que publico. Sé que en algún momento me puede servir para mi profesión: todo lo que posteo queda ahí, listo para ser usado por mis futuros pacientes", dice. Sus hits: el pan integral casero sin harina de trigo y los heladitos de pura fruta.
Con una oferta creciente de cuentas (las hay, también, de recetas vegetarianas, veganas o sin gluten) no hace falta más que investigar y armar un timeline que inspire para encontrar nuevas respuestas a la pregunta del millón.
Algunas sugerencias
Instagram.com/eatcleanOKCon más de 150 mil seguidores es la reina de la cocina saludable y low carb (baja en carbohidratos)
Instagram.com/beauty.freak.room
Otra cuenta fit, de una médica ayurveda. Su fuerte: cómo reemplaza ingredientes clave para comer rico, pero bajo en calorías
Instagram.com/cookstyle
Los mejores asados de Instagram. Grandes ideas para salir del vacío, la provoleta y las achura